Escondidos tras el anonimato de somputaus cdores hay "supuestos famosos" que buscan engañar ... Por esta razón han aparecido empresas que garantizan la protección de identidad y que los datos de algún famoso no serán utilizados por suplantadores. Actualmente, se ha incrementado la tendencia de buscar amigos por Internet. El peligro surge cuando los más jóvenes dominan la tecnología y los padres se niegan a aprenderla, los riesgos están a un clic de distancia: delincuentes cibernéticos buscan a sus víctimas en lugares como el chat, donde primero ganan su confianza para después hacerles daño. Los usuarios de la Red piensan que el anonimato de la computadora es igual a seguridad, sin embargo, mucha de la información que se publica en una Red social es suficiente para vulnerar la integridad de los participantes. Los especialistas aconsejan a los menores a no dar datos personales ni fotos y poner especial cuidado en la Web cam". Cifras El uso de redes sociales se ha incrementado considerablemente. 58% de los internautas entra con frecuencia a chats y redes sociales. 26% de ellos dijo haber aceptado conocer a alguien en persona. 35% de los usuarios de Internet en México tiene entre 12 y 19 años. Casos Hace unas semanas detuvieron a un joven de 15 años por grooming o ciber-acoso. El menor obtuvo fotos desnudas de tres niñas y apoderándose de la lista de contactos de sus cuentas de correo electrónico, las amenazó con difundir las fotos entre sus conocidos. El grooming consiste en obtener las contraseñas del correo electrónico de la víctima y chantajear con envíos masivos de fotos comprometidas si la menor no accede a realizar nuevos actos obscenos por medio de la webcam. Días antes también detuvieron a otro joven de 20 años como presunto autor de un delito de pornografía infantil y corrupción de menores, al colgar en internet fotografías de una menor murciana que no atendió sus exigencias sexuales. El modus operandi que usan los ciber-acosadores consiste en ganarse la confianza de la menor con el objeto de obtener fotografías de desnudos, ofertándole en contraprestación ropa de marca, regalos y dinero. Después, solicitan los favores sexuales de la menor, bajo la amenaza de divulgar sus fotos entre sus contactos o bien colgarlas en internet. Una vez satisfecha esta exigencia inicial, el colmo de este acto repulsivo y abominable es intentar prostituirla para su beneficio económico. Según la psicología clínica no hay un perfil claro de estos rastreros; de hecho pertenecen a variadas profesiones y a diferentes niveles culturales. Lo único claro es que son hombres en un 90%. Según la memoria de la fiscalía, los casos de pornografía infantil subieron un 48% en el último año. No obstante, es necesario que los padres manejen bien las nuevas tecnologías para saber qué hacen sus hijos cuando están conectados a internet. Además, es bueno enseñarles a no abrir archivos de personas desconocidas ni menos de supuestos delincuentes sugiriendo ser "famosos". |